martes, 31 de marzo de 2020

Hipervigilancia




En el BOE de este sábado 28 de marzo se ordena el desarrollo de una aplicación informática por el Estado para la geolocalizacion de los ciudadanos a través de sus teléfonos móviles. Las operadoras telefónicas pasarán datos agregados y anonimizados al Instituto Nacional de Estadística (INE) para analizar la movilidad en los días previos y durante el confinamiento,de momento bajo el anonimato. El Estado podrá verificar si el usuario se encuentra en la comunidad autónoma en que declara estar.


La vigilancia es un instrumento de control de conductas presente en todas las colectividades humanas. Es un tema central de reflexión filosófica y sociológica, destacando en particular Foucault en Vigilar y castigar y el sociólogo norteamericano Edward Ross, que acuñó el término de "control social". También es una fuente de inspiración para  la literatura, como la novela 1984, de George Orwell. Podemos decir que el control social abarca, en general, un conjunto de estrategias sociales que pretenden garantizar el sometimiento del individuo a las leyes y a las normas sociales.

No obstante, debemos hacer una distinción importante entre los mecanismos de control en las sociedades comunitarias y el de las societarias. Las sociedades comunitarias (imaginaos una tribu o aldea) se caracterizan porque en ellas la vida y el interés de sus miembros se identifican con la vida y el interés del conjunto, predominando cierta unanimidad de espíritu, y el todo sobre las partes. El control social en estas sociedades es mayoritariamente informal: la vigilancia y el comadreo se convierten en instrumentos que sancionan la desviación de la conducta de una manera casi inmediata. Eticamente podemos describir esta forma de control social basado en la vigilancia mutua como HETERÓNOMA.

Historicamente, encontramos una tendencia comunitarista en la filosofía política clásica ateniense: si recordáis, para Platón y Aristóteles es más importante el bien de la polis, el bien común, que el bien individual. Pero, a diferencia del comunitarismo tribal, legitimado en la costumbre y la religión, el que proponen los filósofos griegos se basa en la búsqueda del bien común y la justicia a través de la razón. En el caso de Platón y Sócrates, una razón dialógica abierta y antidogmática. Podríamos decir, entonces, que se trata de un comunitarismo que defiende la autonomía del ciudadano. No debemos olvidar la propia muerte de Sócrates, que pudo eludir el castigo pero, obrando por principios morales internos, decidió beber la cicuta. También Aristóteles parte de la prioridad orgánica de la sociedad sobre el individuo, pero fundamentando la justicia en la razón. Es conocido por su estudio comparativo de las diferentes constituciones de la Hélade para orientar la búsqueda racional del bien común.

En conclusión, los filósofos griegos daban prioridad a la comunidad sobre el individuo, a la política sobre la ética, porque era la República -la polis- la que moldeaba y hacía buenos a los ciudadanos. Por ejemplo, una de las críticas que hace Platón en el Gorgias -en boca de Sócrates- a la democracia de Pericles es que, debido a su populismo y demagogia, convertía a sus ciudadanos en charlatanes y codiciosos, pues apelaba a sus más bajos deseos en vez de educarlos moralmente. El populismo de Pericles, según Platón,  atraía a los ciudadanos con inversiones y obras públicas innecesarias, dándole a la polis ateniense una "robustez malsana, atestando la ciudad de puertos, arsenales, muros, tributos y otras necedades (518e/519ª)", es decir criticaba en su época la política del desarrollismo y del ladrillazo, no por sus consecuencias económicas, sino por la corrupción moral que producía en sus ciudadanos.

Si damos un salto muy grande en la historia, veremos que la tendencia comunitarista se invierte claramente en el contractualismo de Locke, cuyas ideas políticas se van a centrar en la defensa de los derechos naturales del individuo frente al poder del Estado. El contractualismo, a diferencia del comunitarismo, se inspira en un concepto de hombre razonable, reflexivo y, consiguientemente, responsable. Este concepto va a dar lugar a la Carta de Derechos de Locke -Bill of Rights- y a desarrollarse mediante el concepto de persona kantiano, conformando  nuestro concepto occidental ético, cultural y jurídico de persona: un sujeto razonable, reflexivo, responsable y autónomo. El principio de AUTONOMÍA se opone al de HETERONOMÍA porque presupone un mecanismo de control interno que respeta la libertad de la persona. La autonomía es inversamente proporcional, en este sentido, a la vigilancia necesaria para mantener el orden social y el bien común: mayor autonomía supone menor necesidad de vigilancia.

No obstante, según vimos en Kohlberg, la adquisición de autonomía es gradual en el desarrollo moral de las personas: un niño se mueve por motivos heterónomos y, como tal, habremos de tratarlo con la debida vigilancia mientras se desarrolla. Porque, además la autonomía es incompatible con la ignorancia, recordando a Kant, ¡Sapere Aude! nos invita a conquistar la autonomía a través del ejercicio de la razón crítica.

La autonomía es un derecho que se desarrolla ampliamente en nuestro sistema jurídico, por el cual se supone que hemos progresado desde un vínculo comunitario hacia un denominado vínculo "societario". Según Tönnies en El espíritu de los tiempos modernos esta transición se produce paulatinamente desde la edad media hasta la actualidad, en la que predomina el vínculo societario basado en el individualismo, libertad de pensamiento, defensa de los derechos y libertades individuales. Este tránsito se produce no sin dificultades, puesto que fueron necesarias, entre otras luchas, una Revolución Gloriosa y una Revolución Francesa para que se asentaran como derecho normativo.

La cuestión que nos planteamos filosoficamente es si, a propósito del miedo a la pandemia, que funciona en las sociedades como un elemento cohesionador, se está produciendo una deriva comunitarista de la sociedad: se busca ejercer el control social total, para impedir cualquier desviación de la norma a través de la vigilancia digital estatal, reforzada por los medios tradicionales propios de las sociedades tribales. Sólo que ahora amplificados por la globalización de las redes sociales.

Mi preguntas de hoy son las siguientes:

Para 2º de BAC:
1.- ¿Crees que hoy en día hay un retroceso hacia el comunitarismo en nuestra sociedad?
2.- Lee el artículo de Chul Han y describe los rasgos comunitaristas de las sociedades asiáticas. ¿Te parece justificable la hipervigilancia para garantizar el bien común? Justifica tu respuesta recurriendo a Locke y Hobbes, si es posible.
3.-¿Crees que el uso de las redes sociales en nuestros días es un instrumento de control social? Justifica tu respuesta.
4.-Chul-Han hace referencia a que "individualismo" no significa egoismo. ¿Puedes explicarlo?

El vínculo comunitario, recordemos, típico de la tribu o aldea, se caracterizaba por un control inmediato y total del individuo a través de mecanismos difusos, con el objetivo de someter toda desviación social, dando lugar a sociedades homogéneas, estables y muy cohesionadas.

Para 1º de BAC y 4º de ESO:

1.- Lee el artículo de Chul Han y describe los rasgos culturales de las sociedades asiáticas. ¿Te parece justificable la hipervigilancia para garantizar el bien común?
2.-¿Crees que el uso de las redes sociales en nuestros días es un instrumento de control? Justifica tu respuesta.
3.-¿Qué te parece la idea de una sociedad homogénea?
4.-Haz una valoración sobre la vigilancia digital.
Enlace al artículo: La emergencia viral y el mundo del mañana. Byung Chul-Han, el filósofo surcoreano que piensa desde Berlín

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